Hoy Christian nos trajo el ipad a la oficina tras su viaje a los EEUU. Otro de esos objetos que está causando fetichismo entre los amantes de apple. Mis primeras impresiones han sido positivas, aunque a nivel personal no le veo mucho uso. El ipad es más pequeño de lo que me imaginaba, más pesado de lo que esperaba y estoy de acuerdo con el comentario de que parace como un iphone en grande, aunque quizá todavía sea de esta opinión porque la mayoría de las aplicaciones que probamos están diseñadas y pensadas para iphone, no utizando por tanto la pontencialidad del ipad.
Su peso y dimensión hacen imposible el utilizarlo con una sola mano y tiendes a buscar un punto de apoyo para utilizarlo, ya sea la barriga, las piernas o una mesa. Otro pequeño detalle es que en numerosas ocasiones sientes que el botón de incio no está muy a mano, sobre todo si usas el dispositivo en modo landscape. Apple sigue bordando la experiencia táctil y por el momento en esto no hay quien les supere.
En mi honesta opinión, un buen producto. No se me cayó la baba al verlo, ni ardo de ganas por ir a la tienda a comprarme uno, como me pasó con la wii, con el ipod o con el iphone. No obstante si alguien me regala uno será bienvenido (a ver si cuela)
1 comment:
qué bien tener uno de esos bichos en la mano,
yo ya estoy leyendo como crear contenidos de video para el ipad.
ya pasó mi cumpleaños y no ha caído uno, así que me toca aguantarme.
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