Ayer después de una dura y agotadora semana de trabajo fui a tomar una pinta de cerveza con David Gambarte, recién llegado de la ciudad condal. Lo que no me imaginaba es que iba a tener una sorpresa para mi. Tras un rato conversando sacó de la mochila una sospechosa bolsa de plástico blanca con cierto tufillo a embutido. Sólo con el olor la boca se me hacía agua. La abro y ¡sorpresa!, chistorra. Creo que la escasez de determinados productos en estas latitudes, te hace disfrutar más de determinados momentos. Ayer comí la mejor chistorra del mundo.
Yo te la guardo
1 year ago
9 comments:
Qué grande! :-)
Y aún sabe mejor con un pañuelico rojo al cuello, una copa de patxarán y una txaranga al lado tocando a todo trapo...
Lo del pañulito rojo y el patxarancito me seduce, pero lo de meter una txaranga que toque a todo trapo en casa me parece un poco demasio ;-) Aunque por mi que no quede, el problema seran los vecinos
Si los vecinos ponen problemas vente a mi casita que estoy aquí al lado y con un bocadito chiquitín me conformo...!
Voy para allá con la txaranga, están tocando paquito el chocolatero
Jajajaja, si encima de chistorra traes a Paquito el chocolatero de banda sonora, nada más nos faltará la sidrina y será una noche para la Historia!!!
Uf... te aseguro que la mezcla de sidra y patxarán cambia la noche. Pero no te me quejes por la mañana porque es un cocktail explosivo.
Deberian prohibirte la Blog. No sabes la envidia que me das. Puedo sentir esa chistorra en la boca, en el buen sentido gastronomico, ehhh!!!
Yo no se que tiene la chistorra, es como los donetes. Tienes unas y te salen amigos por todas partes.
Great blog I enjoyedd reading
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