
Seguro que el mundo está lleno de taxistas honrados, pero ciertamente unos cuantos de ellos se encargan de arruinar la reputación de todo el gremio literalmente estafando a la gente y a los turistas. Os cuento el timo de la estampita que hacen en Estambul que le ha pasado ya a unos cuantos compañeros de trabajo en nuestros repetidos viajes a Estambul.
Te montas en el taxi, el taxi hace la carrera (como dicen los del gremio) y llega la hora de pagar. El coste de un taxi desde el aeropuerto de Estambul oscila entre las 25 y 40 liras dependiendo a donde vayas. Sacas la cartera y le das al susodicho taxista turco un billete de 50 liras. El taxista en plan Juan Tamariz hace un cambio rápido de billetes y te dice le has dado uno de 5 liras enseñándotelo (los billetes de 5 y 50 son muy parecidos) Llego el lio. palabra contra palabra y a pelearse. Le pasado esto a más de uno, así que ojo avizor.
Montarse en un taxi en Estambul es una vuelta a la España de los ochenta. Los taxitas tienden a conducir sin cinturón, con el codo fuera y cigarrito en mano.